Sta. Gianna era miembro devoto de La Sociedad de San Vicente de Paúl y la Acción Católica. Su esposo, Pietro Molla, afirmó que ser parte de estas organizaciones formó a Gianna, y motivó su gran generosidad de espíritu. Muchas organizaciones de servicio se enfrentan con la incertidumbre de los ingresos, y la falta de personal y de voluntarios. Sin embargo, las necesidades de las comunidades a las que sirven no desaparecen, sino que por lo general aumentan. Hoy, rezamos para que el Espíritu Santo guíe y sostenga en su labor a las organizaciones de servicio que brindan apoyo dador de vida a las familias.
Oremos:
Oh Madre Santa, recibiste la buena nueva de la encarnación de Cristo, tu Hijo, con fe y confianza. Concede tu protección a todas las embarazadas que enfrentan dificultades.
Guíanos en nuestro esfuerzo por hacer de nuestras comunidades parroquiales lugares de acogida y asistencia para las madres necesitadas. Ayúdanos a convertirnos en instrumentos del amor y la compasión del Dios bondadoso.
María, Madre de la Iglesia, ayúdanos a crear la cultura de la vida y la civilización de amor, junto con todas las personas de buena voluntad, para alabanza y gloria de Dios Creador, y amante de la vida. Amén.
(Padre Nuestro, Ave María, Gloria al Padre)
La Novena a Santa Gianna